Junto con la clamidia, la gonorrea es una de las enfermedades de transmisión sexual más comunes y fáciles de contagiar en los Estados Unidos en la actualidad. Ambas suelen ir de la mano y pueden aumentar las probabilidades de infectarse también con otras ETS. Es importante reconocer los signos y conocer los riesgos que conlleva el contagio de esta enfermedad.

¿Qué es la gonorrea?

Una infección bacteriana de transmisión sexual común. La gonorrea puede crecer y multiplicarse fácilmente en cualquier zona húmeda y cálida. Además de infectar el cuello uterino o la uretra, puede infectar la garganta o el recto, así como el útero y las trompas de Falopio. Las personas sexualmente activas deben hacerse la prueba al menos una vez al año. Los CDC calculan que cada año se infectan más de 700.000 personas en EE.UU., pero sólo la mitad de ellas se declaran.

¿Cuáles son los síntomas de la gonorrea?

Tanto los hombres como las mujeres pueden tener síntomas leves o no tenerlos cuando están infectados. Los síntomas suelen tardar entre una y tres semanas en desarrollarse. En el caso de las mujeres, las primeras fases no suelen presentar síntomas. Los síntomas pueden incluir flujo vaginal, ardor al orinar o irritación recurrente. En los hombres, la gonorrea suele incluir flujo en el pene y ardor intenso al orinar. Ocasionalmente, los hombres pueden presentar dolor o inflamación de los testículos.

¿Por qué es perjudicial la gonorrea?

La gonorrea no tratada puede tener consecuencias graves y permanentes tanto para hombres como para mujeres. Es una causa común de la enfermedad inflamatoria pélvica, que es difícil de tratar y puede causar dolor pélvico crónico, así como infertilidad en las mujeres y un aumento del riesgo de embarazo ectópico.

La gonorrea también puede causar una grave inflamación de las vías urinarias en los hombres. Puede causar artritis grave (síndrome de Reiter) en mujeres y hombres; si la madre está infectada en el momento del parto, puede causar ceguera u otras infecciones potencialmente mortales en los recién nacidos.

¿Cómo se trata la gonorrea?

Los antibióticos pueden curar con éxito la gonorrea; sin embargo, las complicaciones a largo plazo (como la infertilidad) pueden no ser reversibles. Si un profesional médico le prescribe antibióticos, es importante completar el tratamiento para asegurarse de que la infección ha desaparecido. Ten en cuenta también que la curación de la infección no reparará ningún daño permanente. Si sospechas que puedes tener clamidia y necesitas hacerte una prueba, es importante que lo hagas de inmediato. Localiza la clínica de planificación familiar más cercana y concierta una cita.

Algunos datos han sido extraídos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.